El Arte de Destilar
Destilación es el resultado natural del proceso de evaporación y subsecuente condensación del vapor. El término proviene del latín dēstillāre (dejar caer goteando) y en su forma más simple. Observamos el fenómeno cuando hervimos agua y si al levantar la tapadera la inclinamos, podemos recolectar el vapor condensado, completando así con éxito una destilación.
La idea consiste en someter la sustancia original a un flujo continuo de vapor, el cual arrastrará los componentes más volátiles. Una vez cargado de sustancias, ese vapor se condensará en un serpentín refrigerado, lo que después nos permitirá recuperarlas.
Desde su descubrimiento hasta la actualidad, la tecnología de destilación ha sido el método más sencillo para la separación y purificación de sustancias químicas, pero claro, la tecnología ha evolucionado enormemente y ahora forma parte de muchas industrias incluyendo: la purificación del agua, la producción de bebidas alcohólicas, perfumes, extractos y saborizantes naturales además de ser parte integral de la industria petrolera.