top of page

Galicia Mística

Serea-do-Matadoiro-A-Coruña-c-José-Losada-Flickr.jpg

Nos ponemos místicos y esotéricos para rebuscar alguno de los rincones gallegos con más capacidad evocadora. Construidos por la mano del hombre o enclaves naturales a los que se les atribuyó un significado especial desde el principio de los tiempos, su mezcla de historia y leyenda traza el mapa de un territorio proclive como pocos al misterio y a los significados ocultos.

Monte Pindo; la presencia de los celtas en Galicia es más que discutible; pero esta montaña en las cercanías de Carnota se ha quedado con el sobrenombre de “Olimpo celta” que lo identifica como máximo lugar sagrado, si no para los celtas, sí para los intelectuales gallegos del siglo XVIII en adelante. Leyendas de castillos desaparecidos, megalitos y cuevas a las que se atribuyen significados ocultos y una más tangible explotación de wolframio de la Segunda Guerra Mundial coronan sus impresionantes vistas de una de las mejores playas gallegas.

San Andrés de Teixido, esta blanca iglesia de la sierra de A Capelada es un lugar de peregrinación famoso en toda Galicia porque la gente, bien previsora, sabe que si no se va en vida habrá que ir tres veces de muerto. En los alrededores de la iglesia estaba vetado matar a cualquier animal porque podían ser la reencarnación de algún incauto que no había peregrinado a San Andrés en vida. Sí, reencarnación y catolicismo unidos en una curiosa alianza en este lugar mágico.

Virgen da Barca, Muxía. Ni la romanización ni la cristianización lograron acabar del todo con los cultos primitivos que adoraban la naturaleza y sus elementos. De hecho, el cristianismo, en vez de combatirlos directamente, optó en muchas ocasiones por el expeditivo método de colocar una cruz o una virgen sobre los antiguos lugares de culto y así transformar la devoción por una roca, una fuente o un bosque en algo más ortodoxo.

Así, la iglesia de la Virgen da Barca en Muxía tiñe de respetabilidad el culto eminentemente pagano a las rocas junto a las que está situada, la “pedra de abalar” y la “pedra dos cadrís”, a las que se atribuyen capacidades curativas, adivinatorias o de conceder deseos. Es un lugar que lleva considerándose sagrado o mágico desde que los primeros pobladores llegaron se establecieron allí. El culto cambia, pero la roca permanece.

Galicia Mística
00:00 / 02:15
bottom of page